La utilización de materiales de relleno es una técnica médico estética muy utilizada y que da unos resultados muy satisfactorios para los pacientes. Consiste en la inyección local de distintos productos con el fin de lograr un “efecto volumen” para corregir depresiones aparecidas como consecuencia del paso del tiempo, como arrugas o surcos e incluso cicatrices. También los utilizamos para remodelar algunas de nuestras facciones, bien porque han perdido volumen con los años o porque no nos gusta su estructura natural como labios, mentón, pómulos, nariz o mejillas.

En la actualidad disponemos de una amplia gama de materiales de relleno para adaptarnos a las necesidades de cada paciente. Entre ellos se encuentran los materiales de relleno de última generación; aquellos rellenos que no solo se limitan a eliminar las arrugas o dar volúmenes, sino que, además, estimulan la autoproducción de fibras de colágeno y elastina por parte de nuestro propio organismo. Todos ellos son 100% biocompatibles, por lo que se anula el rechazo por parte de nuestro cuerpo, y reabsorbibles por nuestro organismo.

Forma parte de manera natural de nuestra piel. Lo utilizamos para rellena las arrugas que surgen en frente y entrecejo, al igual que las patas gallo más finas. También para dar volumen a zonas como labios o pómulos. Además, nos ayuda a hidratar la piel en profundidad.

Como en el caso del Ácido Hialurónico, también se encuentra en nuestro cuerpo de forma natural. Con este relleno podemos corregir los pliegues nasolabiales, las líneas de marioneta, arrugas en las mejillas, pliegues en el mentón, etc. Nos proporciona un efecto lifting al conseguir retensar la piel, a través de la generación de nuevo colágeno y tejido conectivo. Con él prevenimos la flacidez.

También lo utilizamos para la corrección de nariz sin cirugía invasiva, como equilibrar asimetrías, moldear la punta o reconstruir el puente nasal.

Una sustancia totalmente biocompatible y reabsorbible por nuestro organismo. Está especialmente indicado para rellenar pómulos, grandes volúmenes o cicatrices deprimidas.

Una proteína que nuestro cuerpo produce de forma natural. Es uno de los principales “bloques de construcción” de muchos de nuestros órganos, entre ellos, la piel.  El relleno de colágeno lo utilizamos en zonas con piel deshidratada y fina, como patas de gallo, líneas peribucales, cuello y escote.

Es el más novedoso de los materiales de relleno. Un producto de relleno que utiliza nuestros propios recursos. A partir del PRP (Plasma Rico en Plaquetas que obtenemos tras la extracción de sangre del paciente) obtenemos la basa para generar el Plasma Gel. Por tanto, cada producto que ponemos en consulta es único y exclusivo de cada paciente. Lo utilizamos para rellenar todo tipo de arrugas, surcos, rictus, código de barras, entrecejo, pómulos. Como el resto de materiales de relleno que comentamos hoy, es 100% biocompatible y reabsorbible por nuestro organismo.