El ácido hialurónico es una sustancia que se encuentra de manera natural en nuestro organismo, formando parte de muchos de nuestros tejidos y órganos, como es la propia piel. Sin embargo, conforme pasan los años, sobre todo a partir de los 35 años, nuestros niveles de ácido hialurónico descienden. En nuestra cara se aprecia su escasez porque conlleva pérdida de volúmenes. Esas formas más redondeadas de la juventud pasan a ser ángulos que endurecen nuestras facciones. Por otro lado, como consecuencia de la pérdida de volumen, aparece la flacidez, pérdida de firmeza en la piel del rostro que, finalmente, traerá las arrugas.
Pero no solo en nuestro rostro se hace patente la falta de ácido hialurónico y, por tanto, la pérdida de volumen que conlleva.
Muchas mujeres, con el paso de los años, van perdiendo volumen en la zona genital, lo que conlleva una hipotrofia o disminución del tamaño de los labios mayores que, además de una cuestión estética, tienen la función de cubrir los labios menores y la zona inferior de entrada a la vagina. La hipotrofia de los labios mayores puede traer consigo problemas de salud, como una mayor sequedad e infecciones en la zona vaginal por desaparecer la barrera natural que suponen.
Además de como consecuencia del paso de los años, podemos perder volumen en la zona vulvo-vaginal por otras razones. Por ejemplo, tras algunos tratamientos médicos o el uso de algunos medicamentos, como puede ser después de un tratamiento de Quimioterapia, el uso de Corticoides o de algunos medicamentos para el acné como el de Roacután.
Ya conocemos la aplicación del ácido hialurónico para el rejuvenecimiento facial. También, en un post reciente, “Tras la Menopausia, la Sequedad Vaginal ya no será un Problema”, os comentaba su uso en esta zona para combatir, definitivamente, la sequedad vaginal tras la menopausia.
Ahora contamos con un nuevo ácido hialurónico específico para la zona vulvo-vaginal, indicado para las atrofias de las que os he hablado. Con él recuperamos el volumen perdidos de los labios mayores. Es un tratamiento que se realiza con anestesia local en consulta y, normalmente, en una única sesión. La duración del tratamiento es de un año.
Tras el tratamiento volvemos a recuperar la zona rehidratándola y aumentando los volúmenes perdidos. No solo nos ayudará a sentirnos más a gusto con nuestro cuerpo sino que, además, evitaremos los problemas de salud que conlleva la falta de volumen en la zona genital.
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Doctora Maroto
