Estamos en la época de las vacaciones. Llevamos todo el año esperándolo. Un merecido descanso después de un largo año, más en el contexto actual.
Muchos haremos una escapada o estaremos unos días de relax en nuestros hogares. Si vas a aprovechar unos días para quedarte tranquilamente en casa, es un buen momento para que te plantees aprovechar este periodo estival para realizarte algunos de los tratamientos faciales, que te ayudarán a volver a las ocupaciones cotidianas con un rostro rejuvenecido y relajado.
Recuperar luminosidad en nuestro rostro, hidratación o tersura en la piel. Deshaciéndonos de la flacidez, las arrugas o todo aquello que nos pone años encima, como las ojeras o el conocido “código de barras” alrededor de la boca, es posible con los tratamientos no invasivos en Dermatología Estética actuales, con muy pocas sesiones.
A mí me gusta, si es necesario, dividir algunos tratamientos en varias sesiones para que vayamos viendo los resultados, y llegar al punto justo que cada rostro necesita. Los excesos en tratamientos faciales se muestran en caras clonadas, que recuerdan a “muñecas peponas”, sin expresividad y que, finalmente, no solo no nos rejuvenecen, sino que nos pueden echar más años encima.
Por eso, cuando venís por primera vez a consulta, os tranquilizo sobre este aspecto. Muchos acudís diciéndome a “quien NO os queréis parecer” y os preocupa más ese punto, que los buenos resultados que podamos obtener. En consulta, la naturalidad es un objetivo clave en cada tratamiento. Buscamos rejuvenecer el rostro, pero siempre manteniendo nuestras señas de identidad.
¿Qué ventajas tiene realizarse un tratamiento Dermatológico Estético Integrativo Facial durante la época vacacional?
La Medicina Estética ha avanzado mucho. Los tratamientos tienen un efecto prácticamente instantáneo. En aquellos casos que se necesita un periodo de tiempo antes de ver sus efectos, ya desde la primera sesión podemos apreciar resultados, aunque sea de forma parcial.
Pero también me gusta informaros de que puede aparecer algún moratón o hinchazón cuando se realiza el tratamiento. Dependerá de la sensibilidad de cada paciente. Hay personas más propensas que otras. En cualquier caso, estos efectos desaparecen a los pocos días.
Por este motivo, las vacaciones son una época idónea para realizar los tratamientos faciales, porque en el caso de que salgan algunos de estos efectos secundarios, ¡no hay problema!. Al día siguiente no hay que volver al trabajo y “dar la cara”.
Los resultados en los tratamientos faciales son, quizá, de los más gratificantes porque a fin de cuentas, nuestro cara es nuestra tarjeta de presentación. ¡Aprovechar las vacaciones para rejuvenecerlo es una buena opción!. No dudes en contactarnos . ¡Podemos ayudarte!.
Doctora Maroto
Medicina Estética Integrativa
Madrid – Mallorca
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