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Las varices y las arañas vasculares son un problema que cada vez afecta a más mujeres y a más temprana edad. Existe un componente hereditario para su aparición, pero también nuestro estilo de vida tiene un fuerte impacto en el proceso. El estrés, el exceso de peso, el uso y abuso de tacones o prendas de vestir ajustadas o el simple hecho de ser mujer, movimientos hormonales y embarazos, suman para sufrir este problema estético o que se agudice.

Aunque en menor medida, los hombres también pueden padecer de varices y arañas vasculares. Según recientes estudios, uno de cada cuatro españoles tiene varices y de ellos, el 35% son hombres. El bello en las piernas impide su apreciación, pero conforme se extiende la costumbre de depilarse, especialemente entre hombres más jóvenes, hace que las varices y arañas vasculares sean visibles.

Hoy en día, afortunadamente, contamos con tratamientos muy efectivos para la eliminación de las varices estéticas, os lo contaba en mi post “¡Eliminar las Varices en Piernas y Rostro es Posible!”, donde además incluía un vídeo demostrativo -puedes verlo pinchando aquí, pero durante el verano no es el momento de aplicar los tratamientos. Deberemos esperar a que pase la época de calor.

Lo que sí podemos hacer desde hoy mismo, es eludir o adquirir ciertos hábitos para prevenir su aparición y, en el caso de ya padecerlas, evitar que vayan a más:

  • Evita coger peso. Es uno de los factores de riesgo que agravando el peligro de sufrirlas.
  • Evita prendas muy ajustadas. Más aun cuando hablamos de tejidos más duros, como los vaqueros.
  • Evita llevar tacones de más de 4 cm. En caso de ponértelos, procura que sea durante poco tiempo y espacia su uso en el tiempo.
  • Evita la retención de líquidos. Para ello, toma infusiones drenantes o suplementos naturales que te ayuden a drenar y a mejorar la fragilidad capilar, evitando que se rompan y se dilaten las venas.
  • Evita la exposición prolongada al sol. Las fuentes de calor, como el sol, agravan el problema.
  • Date paseos por la playa, el campo (o tu ciudad cuando caiga el sol) y si puedes, sumérgete en las aguas del mar o la piscina.
  • Durante las vacaciones, disponemos de más tiempo para nuestro aseo personal. Evita los baños y promueve las duchas. La circulación se activa alternando chorros de agua caliente sobre nuestras piernas, no excesivamente caliente de 38º como máximo, con chorros de agua fría, en una mima ducha. Al finalizar, aplicar agua fría a las pantorrillas en sentido ascendente.

Con estos consejos, amortiguaremos o evitaremos el problema. Y si ya tienes varices y/o arañas vasculares, no dudes en contactarnos cuando baje el calor, sobre octubre. ¡Podemos ayudarte!

 

Doctora Maroto

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